Acerca de Nosotros

Historia

En Costa Rica, al igual que en el resto del mundo, los inicios de la farmacia estuvieron siempre ligados a la medicina desde la época colonial. El florecimiento como profesión se produjo en el siglo XIX, pero con un ligamen estrecho, al punto que la mayoría de las boticas estuvieron regentadas por médicos gracias al decreto promulgado en 1841 por Don Braulio Carrillo (Jefe de Estado), quién autorizaba “ …a los médicos y cirujanos por el término de dos años”, a tener una botica y despachar en ella, “con tal que cada uno enseñara, a su costa, la Farmacia a un joven, bajo la inspección inmediata de la autoridad política local”. 1

Asimismo, el Dr. José María Castro Madriz, creó por ley, la Universidad de Santo Tomás, el 3 de mayo de 1843 y el 17 de enero de 1849 abrió en dicha universidad la Cátedra de Farmacia, pero debido al escaso interés de los jóvenes estudiantes de la época en las ciencias aplicadas tuvo que cerrarse. El 20 de julio de 1849, dada la escasez de farmacéuticos, el Dr. Castro Madriz, autorizó a los médicos la tenencia de farmacias hasta tanto la cantidad de farmacéuticos fuera inferior a cinco en toda la nación. A pesar de la legislación existente, los médicos debieron continuar ejerciendo labores de farmacia y al tener necesidad de contar con una persona que le ayudara en dichas labores, se dieron a la tarea de transmitir los conocimientos de farmacia que poseían a costarricenses con cierto grado de instrucción escolar, esto ocurrió hasta la fundación del Hospital San Juan de Dios, donde la enseñanza de la Farmacia se impartió por varios años hasta la fundación de la Escuela de Farmacia el 8 de febrero de 1897, durante la administración de Don Rafael Iglesias. 2

La Escuela de Farmacia, desde su fundación hasta la creación del Colegio de Farmacéuticos en 1902, fue dependencia de la Facultad de Medicina, Cirugía y Farmacia, entidad gremial constituida por todos los profesionales en estas áreas, autorizados por la ley a ejercer las respectivas profesiones. El aprendizaje de la profesión farmacéutica estuvo bajo las órdenes del Colegio de Farmacéuticos de Costa Rica hasta la fundación de la Universidad de Costa Rica, en el año 1940, pasando a ser parte integral de la misma como Facultad de Farmacia. 3

La Facultad de Farmacia continúo su progreso consecuente con los principios institucionales. Durante su recorrido ha experimentado muy buenos momentos y se ha proyectado hacia la comunidad costarricense. Así durante su historia ha tenido cambios relevantes para responder a las necesidades del país, por lo que recientemente, revisó y aprobó en sesión ordinaria No.722 de la Asamblea de Facultad, celebrada el miércoles 12 de febrero de 2014, su misión y visión, y sus objetivos planteados en función de las actividades que realiza la Facultad y de los resultados esperados.

1. Fumero P. Centenario de la Facultad de Farmacia. Universidad de Costa Rica: 1897-1997. Editorial de la Universidad de Costa Rica; 1998.

2. Viales, R. El Colegio de Farmacéuticos y la Institucionalización de la Farmacia en Costa Rica 1902-2002. Masterlitho S. A. Costa Rica. 2003.

3. Fumero P. Centenario de la Facultad de Farmacia. Universidad de Costa Rica: 1897-1997. Editorial de la Universidad de Costa Rica; 1998.

Misión

Somos una Facultad centenaria, prestigiosa y líder en la formación académica de profesionales de grado y posgrado en Farmacia, con calidad y excelencia; integrando Acción Social e Investigación, y comprometida con la mejora de la Salud Pública y el desarrollo socio-económico del país.

Visión

Ser una de las mejores y más reconocidas Facultades en Latinoamérica por su excelencia y calidad en la formación de profesionales en Farmacia; así como por su contribución a la Salud Pública mediante la investigación y el vínculo con la sociedad.

Valores

Nos comunicamos de forma asertiva, tanto a nivel interno (estudiantes, docentes y personal administrativo) como externo.

Compartimos conocimientos, experiencias y esfuerzos aportando lo mejor de cada uno para un trabajo conjunto, compartido y colaborativo.

Realizamos nuestro trabajo comprometidos con las personas, los deberes, los procesos y resultados que involucran la misión y visión de la Facultad.

Reconocemos el valor y los derechos de las personas tanto a nivel interno (estudiantes, docentes y personal administrativo) como externo.

Realizamos todos los procesos del quehacer universitario en forma sobresaliente y procurando siempre la mejora continua.

Estimulamos las competencias y fortalezas de estudiantes, docentes y personal administrativo, para el óptimo desempeño y cumplimiento de la misión.

Nos sensibilizamos y actuamos ante las necesidades del entorno.

Organigrama